La buena actitud en un trabajo desafiante

No es necesario comprobar que un ambiente laboral desafiante puede acabar con nuestra motivación, y hace que nuestro trabajo y desempeño sea un poco menos eficiente. ¡Pero hay maneras resilientes de lidiar con esa situación! Y nos gustaría que las llevaras a cabo después de echarle un vistazo a nuestra nueva entrada.

¡Este es uno de los asuntos más polémicos e interesantes que existen respecto a la Cultura Organizacional! Y aunque se trata del aspecto negativo que la engloba, es posible abordar el tema de ambiente laboral tóxico desde la perspectiva de la resiliencia, la madurez emocional y otros aspectos personales que nos pueden ayudar a sobrellevar dichas situaciones.

Sabemos que no todas las personas, independientemente de sus puestos en una empresa, cuentan con estas cualidades, y un aspecto que más resalta de la toxicidad laboral es la forma en que esta perjudica nuestra motivación, nuestras ganas de trabajar.

Esto es todavía más grave y notorio cuando el problema surge a raíz del poco o nulo reconocimiento de parte de los líderes o directivos que no reconocen el trabajo de su equipo, limitándose a tener actitudes poco agradables y constructivas. ¿El resultado? Frustración, enojo, decepción…todo lo que desmotiva.

Por fortuna, y retomando algo importante del primer párrafo, existen formas de manejar estas situaciones de manera sana para nosotros, lo que nos puede ayudar a fortalecer nuestra resiliencia y tomar decisiones adecuadas para este problema. A fin de cuentas: el problema no siempre es el problema, sino cómo reaccionamos ante ello.

Esto te puede servir…

·      Enfócate en lo que puedes controlar

En un entorno negativo, es fácil sentirse atrapado o impotente. Céntrate en tus tareas y en cómo puedes mejorar tus habilidades, independientemente de las circunstancias. Piensa en cómo puedes adaptarte y aprender en lugar de frustrarte por lo que está fuera de tu control.

·      Establece límites claros

Mantén límites claros entre tu trabajo y tu vida personal para evitar llevar la toxicidad a casa. Si es posible, establece horarios de descanso o tiempo fuera del trabajo para desconectarte y recuperarte mentalmente.

·      Cultiva una red de apoyo

Rodéate de personas positivas, ya sean amigos, familiares o colegas de otros equipos. Estos contactos pueden ayudarte a desahogarte y ofrecer perspectivas objetivas y apoyo emocional, que son valiosos en ambientes difíciles.

·      Desarrolla una mentalidad de crecimiento

Trata de ver los desafíos del ambiente laboral como oportunidades para crecer y mejorar tus habilidades de resiliencia, gestión del estrés y comunicación. Este enfoque puede ayudarte a transformar la experiencia en algo que sume valor a tu carrera.

·      No internalices el ambiente tóxico

La negatividad de un ambiente laboral puede influir en la autoestima y percepción de uno mismo. Recuerda que las actitudes o comportamientos de otros no reflejan tu valor personal ni tus capacidades profesionales.

·      Utiliza el humor y prácticas de autocuidado

Tomarte un momento para reír o ver con perspectiva el entorno puede aliviar el estrés y distanciarte emocionalmente de los problemas. Practicar actividades como meditación, ejercicio o hobbies fuera del trabajo también ayuda a manejar mejor el estrés diario.

¡No es tan difícil como parece! De igual manera, la decisión es tuya, y en caso de que estos consejos no te sean suficientes, siempre puedes optar en buscar algo mucho más beneficioso para tu vida personal y profesional.

¿Qué tanto te llama la atención la Cultura Organizacional? ¡Te invitamos a aprender más sobre ella en